viernes, 9 de noviembre de 2007

La verdad, no se como expresar lo que siento. Me siento estúpida al intentarlo, creo que ya nada tiene sentido.
Podría escribir mil excusas, mil explicaciones, pero no acallarían mi cabeza. Nada me ayuda ya.
Son instantes, son casualidades, son los nervios, el estado de ánimo. Todo pasa tan rápido, viene y se va sin que te des apenas cuenta. Pero una vez pasa te odias, te arrepientes y no consigues explicarte como ha podido suceder.
Nada hace que el tiempo vuelva atrás. Nada consigue calmar esta rabia que siento dentro, este odio hacia mi misma. Nada.
Ya sólo resta pedir perdón y esperar que lo aceptes. Esperar que entiendas lo que me llevó a perder los nervios, la razón y, posiblemente, a un amigo.

Me arrepiento mucho de que escuchases gritos que no te correspondían y mucho menos te merecías.

Sin más me despido hasta pronto, con la esperanza de un abrazo de esos que tanto necesito.

Un beso, Loren.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Hostias, me estoy preocupando. Hoy no se me os escapáis ambos.

Qué malo es pasarse el día en casa.

Anónimo dijo...

Te he llamado y me ha saltado el contestador. ¿Cómo vas a perderme si te adoro? Cada segundo que pasa nuestra amistad se consolida más (para mi desdicha, claro)
Ya te dije en el sms que no pasaba nada.
Estoy deseando abrazarte y arrancarte el escalofrío.
Besos (sólo uno, ¿eh?)

Anónimo dijo...

Esto es un pitorreo, soy adicto a tus textos y no me sirve mi ración diaria. Me acostumbraste a leer todos los días tus cosas, ahora ajo y agua.

Eso está muy mal, espero que subsanes pronto esta situación de desididia y abandono.

Besos! (sólo uno, ¿eh?)

Anónimo dijo...

No metas prisa a la chica hombre, que todos tenemos vida :P

Eso sí, las raciones que se repartan por el grupo, ergo, ¡¡suelta ya las obras completas, guardiñas!! xD