miércoles, 23 de enero de 2008

Belleza inmortal


Una mujer desconocida y vestida de terciopelo negro entró en su fiesta. Era muy pálida e increíblemente bella. Algunos hombres quisieron bailar con ella, otros invitarla a tomar algo, pero ella, con educación, se negó.
En su camino hasta el trono hubo algunos que la reconocieron y, de repente, todo se quedó en silencio.
Cuando llegó ante la reina, hizo una reverencia. La reina le cogió la mano y la acompañó.
Ella y la muerte se fueron antes de que terminara la última canción.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Jezú! Después de esto confirmo el comentario que realicé en la anterior entrada: estoy totalmente fuera de esta onda. ¡Un traductor Ana, tráeme un traductor...!

En serio, muy buenos recursos: palidez, terciopelo, muerte. Faltó por ahí el color azul, para engordarlo más todavía.

Sea tuyo o no, es un buen fragmento.

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Como te dije antes: un microrelato precioso y perfecto, su tono poético y su trama me recuerda mucho a los cuentos de Wilde (él también tiene microrelatos)

Un besazo!
P.D. El Tristán ha durado 4 horas, 5 con el descanso, pero ha sido una auténtica maravilla. Lo hemos disfrutado muchísimo.

Anónimo dijo...

Suscribo las palabras de mi compañero, aunque me tuve que marchar veinte minutos antes del final. Una auténtica maravilla, y no he llorado porque me faltaban neuronas para hacer tantas cosas a la vez. ¡EXCEPCIONAL!

Un abrazo.